En su discurso principal de dos horas en la conferencia de desarrolladores GTC de Nvidia, el CEO Jensen Huang ofreció una presentación cautivadora ante un auditorio lleno en el SAP Center de San José. Vistiendo una elegante chaqueta de cuero negro, que reflejaba tanto la moda como el espíritu innovador del evento, Huang recordó humorísticamente a la audiencia que, aunque no se trataba de un concierto, Nvidia se ha consolidado como un destacado actor en el ámbito de la IA durante el último año.
En lugar de enfocarse en el aumento significativo de las acciones de Nvidia provocado por el auge de la IA generativa tras el lanzamiento de ChatGPT de OpenAI en noviembre de 2022, Huang destacó la destreza técnica de la compañía. Introdujo la GPU Blackwell, un nuevo procesador potente diseñado para cargas de trabajo de inferencia de modelos de lenguaje grandes (LLM), que ofrece un notable aumento de rendimiento de 30 veces en comparación con modelos anteriores. Huang enfatizó que esta "gran, gran GPU" es fundamental para la nueva revolución industrial de la IA generativa, que exige capacidades rápidas de procesamiento de datos y hardware mejorado para soportar aplicaciones de software masivas en diversos campos, incluyendo la salud y la robótica.
La presentación centrada en la tecnología estaba claramente dirigida a los desarrolladores, la columna vertebral del éxito de Nvidia. "Quiero mostrarles el alma de Nvidia", declaró, ilustrando la convergencia de gráficos por computadora, física e inteligencia artificial en una sola plataforma.
Sin embargo, el discurso de Huang pasó por alto en gran medida las implicaciones sociales más amplias de la IA. No se abordaron temas sobre el impacto de la IA en el workforce, las habilidades laborales o consideraciones éticas como el sesgo y la desinformación. Además, aunque mencionó la eficiencia energética, subrayó poco sobre los efectos ambientales de los procesos de fabricación de Nvidia.
La keynote incluyó una demostración de los robots de IA de Disney, desarrollados utilizando la plataforma de robótica Isaac Sim de Nvidia, antes de profundizar en la visión de Huang sobre la computación acelerada. Describió un futuro impulsado por una industria de IA generativa de 100 billones de dólares, respaldada por la plataforma Blackwell y por innovaciones como los microservicios NIM de Nvidia, el marco NEMO y la robótica Omniverse.
La presentación concluyó con un impactante video que mostraba una aeronave al estilo de Star Trek pilotada por un animado Jensen Huang, simbolizando la búsqueda de nuevas fronteras y el inicio de una nueva era en la computación. A medida que los desarrolladores de Nvidia se preparan para este ambicioso viaje, la pregunta crucial permanece: ¿Está la sociedad lista para la transformación y el potencial turbulento que se avecina?