Sakana AI, una startup con sede en Tokio cofundada por dos exingenieros de Google, ha recaudado con éxito $30 millones en fondos semilla de destacados inversores en tecnología. Fundada apenas el año pasado, Sakana AI está innovando en inteligencia artificial al crear modelos más pequeños y eficientes inspirados en fenómenos naturales.
La ronda de financiamiento fue liderada por Lux Capital, conocida por invertir en empresas de IA innovadoras como Hugging Face, y Khosla Ventures, que apoyó a OpenAI desde 2019. Además, importantes empresas tecnológicas japonesas como Sony, NTT y KDDI participaron, evidenciando un sólido respaldo de los principales actores nacionales hacia Sakana.
Sakana, que significa "pez" en japonés, se inspira en los comportamientos colectivos de grupos animales, como los cardúmenes de peces y los bandadas de aves. La startup sostiene que modelos de IA más pequeños que colaboran pueden superar a modelos más grandes creados mediante métodos tradicionales que dependen de conjuntos de datos masivos.
Los cofundadores David Ha y Llion Jones previamente lideraron la investigación en IA en Google, donde Jones coescribió el influyente artículo sobre el modelo Transformer en 2017, que informa la funcionalidad de chatbots como ChatGPT de OpenAI.
En un panorama donde la industria de IA a menudo prioriza el aumento del tamaño de los modelos para alcanzar altos estándares, el concepto de Sakana ofrece una alternativa refrescante. Si bien los modelos más grandes han demostrado resultados impresionantes, también han enfrentado críticas por los extensos recursos computacionales y el impacto ambiental que requieren.
El liderazgo de Sakana argumenta que a medida que los modelos crecen, se vuelven menos eficientes. En cambio, modelos más pequeños y especializados pueden trabajar juntos, similar a equipos donde individuos con habilidades diversas superan de manera colaborativa a un solo experto que maneja tareas complejas.
Los altos perfiles de los fundadores de Sakana y su visión innovadora han atraído financiamiento sustancial tanto de inversores de Silicon Valley como de Japón, estableciendo su laboratorio en Tokio después de solo un año de operaciones independientes. Con nuevos capitales y asociaciones con líderes de la industria como NTT, Sakana busca expandir su equipo y mejorar sus metodologías de IA inspiradas en la naturaleza.
Esta inversión en etapa temprana por parte de gigantes tecnológicos de EE. UU. y Japón señala confianza en que Sakana podría redefinir el desarrollo de IA en Asia, posicionando potencialmente a Japón como un jugador clave en un ámbito tecnológico estratégico históricamente dominado por EE. UU. y China.