Cambios Ejecutivos en OpenAI Generan Atención en la Industria
Recientes cambios en altos niveles ejecutivos de OpenAI han captado una considerable atención dentro del sector tecnológico. En los últimos meses, la empresa ha presenciado una notable oleada de salidas, que incluye a dos cofundadores, un líder de producto, un jefe de seguridad y un exmiembro de la junta. Actualmente, solo permanecen dos ejecutivos clave en el equipo de gestión central, junto con varias reestructuraciones internas.
Ante esta serie de desvinculaciones, un nuevo equipo de liderazgo está tomando forma. Jakub Pachocki ha sido ascendido a Científico Jefe, cargo que ocupa desde su incorporación a OpenAI en 2017. Pachocki reemplaza al cofundador saliente Ilya Sutskever, quien fue noticia el año pasado tras la controvertida destitución del CEO Sam Altman. Esta promoción permite a Pachocki definir la dirección y visión de la investigación de la empresa, aunque su relación laboral previa con Sutskever estuvo marcada por tensiones.
Barret Zoph ha sido nombrado jefe del departamento de post-entrenamiento. Tras la salida del cofundador John Schulman, Zoph, como único reporte directo de Schulman, ha comenzado a emerger como una figura clave en la organización. Bajo la guía de Schulman, Zoph gestionó las operaciones diarias del equipo de post-entrenamiento, asegurando la exitosa implementación de los modelos fundamentales de OpenAI en ChatGPT y su API para desarrolladores.
Mark Chen dirige ahora el departamento de investigación de frontera. Se unió a OpenAI en 2018 después de una carrera en trading cuantitativo, y lidera un equipo dedicado a avanzar en la investigación vanguardista de la empresa. En noviembre pasado, tras la destitución de Altman, Chen, junto a Zoph y el investigador Liam Fedus, se convirtió en un comunicador clave entre la gestión y el personal, compartiendo una carta que expresaba el apoyo de los empleados a Altman, que obtuvo una mayoría de firmas.
Lilian Weng es ahora responsable del departamento de sistemas de seguridad. OpenAI ha consolidado recientemente sus equipos enfocados en la seguridad de la IA bajo el liderazgo de Weng, con el objetivo de mejorar la gestión de preocupaciones de seguridad tanto a largo como a corto plazo. Este movimiento ha suscitado ciertas inquietudes entre los investigadores sobre posibles conflictos de interés.
Los analistas de la industria sugieren que un desafío crítico que enfrenta OpenAI radica en la tensión entre su misión sin fines de lucro y el giro hacia la comercialización, una tendencia que ha llevado a la renuncia de varios miembros clave del equipo. Además, factores como una demanda que involucra al CEO de Tesla, Elon Musk, y presiones relacionadas con financiamiento y competencia han complicado aún más el panorama de la empresa.