El Apple Vision Pro ofrece una notable facilidad de uso, gracias a su interfaz sin controladores. Los usuarios simplemente miran un control y tocan su dedo índice con el pulgar para hacer selecciones. Sin embargo, los gestos manuales pueden ser un desafío, si no imposibles, para millones de personas en todo el mundo que sufren de parálisis en las extremidades superiores. Recientemente, Synchron presentó un avance significativo en la computación espacial, permitiendo que los usuarios del implante de interfaz cerebro-computadora (BCI) Stentrode controlen el Apple Vision Pro.
Un video de demostración mostró a Mark, un usuario con esclerosis lateral amiotrófica (ELA) que ha perdido la capacidad de mover sus manos. Gracias al BCI, ahora puede interactuar con un visor de realidad mixta. La tecnología de seguimiento ocular del Vision Pro permite que el cursor se mueva solo con la mirada, y el BCI de Synchron detecta la intención de Mark de realizar pequeños gestos manuales. Pudo jugar al solitario, navegar por internet, ver videos en Apple TV y enviar mensajes de texto, seleccionando palabras a través de una combinación del BCI de Synchron y el software del Vision Pro.
Este avance sigue a una demostración notable en la que Mark utilizó una interfaz de chat de texto mejorada por ChatGPT, que facilita la comunicación. El video de YouTube de Synchron resalta esta tecnología innovadora. Mucho antes de Neuralink, Synchron estaba a la vanguardia de la investigación en BCI, siendo el Stentrode el primer BCI implantado en humanos, comenzando sus ensayos clínicos en 2022. Synchron emplea métodos bien establecidos como stents y cirugía endovascular. Mientras Neuralink ofrece capacidades impresionantes que imitan el control del mouse a través de su BCI, requiere cirugía invasiva en el cráneo.
Aunque el hardware de BCI tiende a acaparar titulares, la integración efectiva del software con dispositivos externos es crucial para crear una experiencia fluida y amigable—algo que esta nueva tecnología ejemplifica. Actualmente, la disponibilidad de esta innovación es limitada debido a los ensayos clínicos en curso tanto para Synchron como para Neuralink. Como resultado, podría tomar varios años antes de que el control mental de computadoras se convierta en una realidad. Si bien estos avances son emocionantes, es esencial realizar pruebas extensivas a lo largo del tiempo para garantizar la seguridad del usuario.